Este espacio pretende ser un blog en el que 7 personas compartirán sus experiencias personales, sus miedos e ilusiones y cualquier cosa que se les pase por la cabeza con total libertad.
La vida es complicada, ser feliz, cuidarse, tener hijos es toda una aventura. 7 experiencias anónimas para reflexionar, reír, aprender o discrepar. Nosotros os ponemos el foro, vosotros la magia de compartir vuestras inquietudes.

13 de junio de 2011

Armario de la nueva temporada

Paula - El armario de Paula

Miércoles 10 de la mañana oigo un pip,pip, en mi móvil, ¡Ha entrado un mensaje nuevo! Al abrirlo descubro: Adelántate a las rebajas, 40% de descuento para nuestros clientes desde hoy y pienso, bien pasaré esta tarde, ya que mi hijo necesita un pantalón azul para este verano.


Entre el momento que recibo el mensaje y llego a la tienda voy pensando en que necesita realmente. Por la experiencia del pasado año y habiendo sacado ya la ropa que le vale de la temporada anterior me doy cuenta de que necesita poca cosa. Gracias a Díos es un chico. Hago memoria y pienso, pantalón blanco, beige, rojo y me falta el azul marino. Las camisas del año anterior me valen ya que son para dos temporadas, (el próximo año habrá que cambiarlas) y con varios polos en colores básicos (azul claro, blanco, azul marino y rojo) ya tengo para pasar el verano tanto en la ciudad, como en el campo o en la playa. Eso si, ya había pasado por la tienda para comprarle algún conjunto de temporada, ya que hemos tenido que ir a varias comuniones.

Decido ir a medio día por que creo que habrá menos gente, pero me equivoco. Está lleno, todo revuelto y la cola para pagar es larguísima, pero merece la pena. De nuevo agradezco tener un niño y no una niña. ¿Por qué? La mayoría de las cosas que hay son de niña, vestidos monísimos, colores muy alegres, todas las tallas, faldas, pantalones, camisetas, camisones unos bañadores que no sabría cual elegir.  En cambio para los niños es un poco aburrido, aun así miro por si se me ocurre comprar algo en lo que no he pensado. A mí no me gustan las prendas en las que la marca de la tienda ocupa un lugar preferente y excesivamente grande, por lo que descartando estas me quedan pocas opciones.
Voy a mirar algún bañador, justo la talla que necesito debe de ser la mas solicitada por que no queda ninguno, me pasa lo mismo con los pijamas, no hay nada que hacer. Por fin encuentro el pantalón corto chino azul marino que necesita mi hijo,  solo hay uno de su talla y el botón esta mal cosido, ¡No importa, por este precio me lo llevo igual! Ahora a hacer la cola, las personas que están delante mío llevan montañas de ropa por lo que es un poco lento, gracias a esto tengo la oportunidad de preguntar a una dependienta si tienen otro pantalón como el que quiero y ¡Suerte! Les queda uno en el almacén.

Después de pagar salgo de la tienda sintiéndome ridícula con mi pequeña bolsa para un pantalón cuando todos a mi alrededor van cargados de bolsas y pienso realmente ¡Les dará tiempo a usar todo lo que se llevan! Y es mas ¡Si tuviera una niña mis bolsas serían igual de grandes! Y debido a esto seguramente mi armario tendría menos cosas para mi, por lo tanto de nuevo ¡Gracias Señor por haberme dado un hijo! Soy un poco egoísta pero en casa de momento, y si Dios no decide lo contrario, la única mujer que entra soy yo.

Espero vuestros comentarios.

Hasta la próxima.

1 comentario:

  1. ¡Que razón tienes Paula! Nada que ver niño con niña, y eso hablando de ropa. No te puedes imaginar el ahorro que tienes con el niño ya que no lleva complementos: gomas de pelo y lazos, eso es otro capítulo!!!

    ResponderEliminar